Necesitamos constantemente del alimento espiritual para estar fortalecidos

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Los Camellos

Los camellos son animales increíbles que no dejan de sorprender a los científicos. Tienen la capacidad de aguantar varios días sin comer, además de soportar bruscos cambios de clima en el desierto, gracias a los depósitos que tienen en sus lomos. Es un error común, pensar que estos animales almacenan agua en sus jorobas, porque lo que almacenan es grasa.

La piel de los camellos evita que suden demasiado; sus células sanguíneas son lo suficientemente diminutas como para mantenerse en circulación por causa de la deshidratación. Si un camello sediento encuentra un oasis, sus glóbulos rojos pueden aumentar hasta más del doble de su tamaño y puede  beber entre 106 a 170 litros de agua.

Esta es una capacidad formidable que fue dada a estos animales; sin embargo, en el ámbito espiritual, no fuimos dotados de la misma manera, porque no podemos alimentarnos tan rápido, ni  mucho menos resistir a los bruscos cambios de temperatura en el desierto de la vida.

Muchas veces cometemos el error de creer que una sola lectura de la biblia o una tenue oración, cuando estamos en problemas; serán suficientes para sobrevivir en algún desierto que estamos atravesando. La verdad, es que necesitamos constantemente del alimento espiritual para estar fortalecidos y resistir sin desfallecer.

Salmos 67:1 “Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el alma mía”

En éste versículo el salmista se compara así mismo con un ciervo que necesita constantemente agua y lugares de refugio; de igual manera necesitamos a Dios y de su incomparable protección en medio de las áridas tierras de nuestras tribulaciones.

¿Te sientes consumido y debilitado ante el desierto que estás atravesando?, ¿constantemente tropiezas y no logras levantarte?, ¿sientes que tus fuerzas han menguado espiritualmente?

Quizás hasta hoy has tratado de manejar tus momentos de oración y de lectura creyendo que tienes la misma capacidad de retención de alimentos y líquidos que la de un camello. Ha llegado el momento de reconocer con humildad la necesidad que tienes de Dios a cada instante.

Fortalece tu vida con oración y lecturas bíblicas constantes, para que tengas descanso, adquieras sabiduría y alcances la victoria.

Salmos 1:2-3 “Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará”

Por: Héctor Colque

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