Sentirse alejado de Dios es uno de los sentimientos más duros que el verdadero cristiano puede llegar a sentir.
¿Has experimentado esos momentos de la vida en la cual por alguna razón nos sentimos alejados de Dios?, hablo de esos momentos en los que no logramos percibir su presencia o sentimos como que estamos en un desierto en donde todo parece solitario y en silencio.
¿Alguna vez has dicho: “Me siento alejado de Dios”?, es una frase que regularmente ocupamos para referirnos al hecho que nuestra relación personal con Él no está del todo como tendría que estar.
Quizá por alguna razón has dejado de orar, quizá ya no estás leyendo la Biblia como acostumbrabas a hacerlo, quizá el congregarte ahora se te hace un poco pesado y siempre encuentras una buena excusa para quedarte en tu casa.