Era pastor y estaba acostumbrado a aconsejar a sus fieles que mantuvieran su fe en tiempos difíciles. “Dios siempre tiene un plan. Confía en su voluntad.
Un día, después del servicio, conduciendo a casa, se dio cuenta de que una de sus vecinas, una mujer de 78 años, estuvo involucrada en un accidente automovilístico.